Iniciamos
un nuevo año lleno de alegrías y esperanzas pero también con metas que nos
hemos propuesto desde lo personal hasta lo comunitario alcanzar.
Diciembre
nos dejó la alegría de la navidad que no es otra cosa que el nacimiento del
Niño Dios en medio de nosotros que vino al mundo a traernos paz, alegría, amor
y bendiciones. Pero también diciembre nos dejó un poco de peso corporal por las
cantidad de cenas navideñas que compartimos en familia y con amigos, pero, que
a partir de este mes de enero nos hemos puesto la meta de perder esas libras de
más haciendo ejercicios. También el año lo iniciamos con los mismos problemas
del año anterior sin que nadie salga al frente para darles un parao y darles
solución. A medida que los días pasan del mes de enero va aumentando el número
de venezolanos que pierden sus vidas en manos de la inseguridad que a todos nos
ataca por igual. Igual va en aumento el precio de los alimentos y el
desabastecimiento de los mismos. Seguimos con hospitales sin insumos, policías
mal pagados y mal equipados. Se mantienen las vías terrestres destruidas, el
problema de los apagones eléctricos se mantienen dañando los pocos equipos del hogar
que con sacrificio el venezolano logra comprar. En resumen: los problemas son
los mismos del año pasado y los diputados del PSUV al parecer no les importa
tocarlos en la AN y menos buscar los responsables de los mismos. Los miembros
del PSUV cuando hablan en la AN es en defensa del presidente: será que son
médicos y piensan que con salir a la calle con sus partidarios podrán vencer el
cáncer que padece el presidente de Venezuela?
Hasta
ahora ningún factor democrático ha desconocido la voluntad popular expresada a
través del voto el 7 octubre 2012 cuando el presidente fue re-electo para un
nuevo periodo presidencial. Uno de los primeros en reconocer al presidente como
re-electo es Henrique Capriles R. quien fuera el candidato de la alternativa
democrática que no salió favorecido, y que a pesar del momento histórico que
estamos viviendo los venezolanos sigue llamando a la calma, cordura y sensatez
para no caer en el terreno de la violencia como quiere una parte del sector
oficial.
Fueron
claras las palabras del presidente re-electo el pasado 8 diciembre 2012 cuando
dejó las indicaciones a sus partidarios y al país sobre lo que se tenía que
hacer si él no podía venir a la toma de posesión. Sin embargo, aquellos que les
dio el mandato directo de hacer su voluntad lo menos que han hecho en estos es
día es cumplirla llevando al país a un problema político resuelto en la
Constitución que el TSJ interpretó a complacencia del PSUV pero que sin embargo
aun se mantienen los problemas internos de liderazgo ya que el único líder del
partido y del régimen está convaleciente de su enfermedad en Cuba. La
interpretación y decisión tomada por el TSJ en nada sorprendió al pueblo
venezolano ya que bien sabemos que los poderes en Venezuela no son independientes
sino que son un ministerio más del poder central del país. Podemos decir que la
ley nos da la razón pero los tribunales nos condenan por sus interpretaciones.
El
problema del país nos el presidente, quien es un títere de Los Castros porque
si Chavez sale del poder Cuba se viene abajo porque no va poder mantenerse sin
el petróleo de los venezolanos. Podemos decir que luchar por la independencia
de Venezuela es luchar por la independencia de otros países que viven sometidos
a regímenes parecidos al venezolano y que sobreviven por nuestro petróleo y
recursos económicos.
Lamentable
mientras tengamos un pueblo indiferente continuaremos con esta desgracia en el
país que en nada se parece a la democracia. Aun tenemos mucho que madurar ya
que tenemos un pueblo que piensa con el estomago y no con la cabeza. El peor
negocio del mundo es hipotecar la libertad por una vivienda, cesta de comida o
beca que llaman misión.
Este
régimen se parece a una película del Conde Dracula ya que todos los días los
venezolanos agarramos los diarios con miedo para leerlos y enterarnos a quien
mataron, expropiaron, robaron o secuestraron. No podemos acostumbrarnos a vivir
de esa manera. Necesitamos vivir en paz y en tranquilidad.
No
podemos seguir viviendo en un país donde el único que se cree líder que puede
gobernar el país es el presidente re-electo como si el resto de los venezolanos
somos ignorantes, analfabetas o bolsas. Una persona que se cree indispensable
es narcisista, psicópata y comunista al modelo Che Guevara y Fidel Castro.
Definitivamente
el PSUV no respeta la voluntad popular ni presidencial del 8 diciembre 2012.
Nos
toca como pueblo venezolano seguir de pie, defender la Constitución y seguir
trabajando por la Venezuela de paz, seguridad y progreso que todos queremos
pero que tenemos que merecernos trabajando en unidad nacional.
Dios y La Virgen de
Coromoto bendigan a Venezuela. Amén.
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