La
democracia nos permite elegir y renovar tantos a la autoridades nacionales,
regionales y municipales y eso es lo que haremos todos los venezolanos el
próximo 7 octubre cuando a través del voto libre y secreto podamos elegir a una
persona que venga a renovar todo el sistema democrático en el país.
La
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela que nos dimos los
venezolanos decía en su texto original antes de ser modificada, que solo se
podía elegir una persona por dos períodos constitucionales seguidos. Sin
embargo, el actual presidente pensando no en un proyecto nacional sino
personalista propuso que los cargos por representación popular fueran de
carácter indefinido. A través del voto los venezolanos podremos elegir una
nueva autoridad que esté al servicio de los venezolanos los 365 días del años
durante un período constitucional de 6 años donde esta persona no tendrá
vacaciones sino que será un servidor público y no autócrata al frente del
gobierno que lo único que busca es que lo sirvan aquellos que él representa.
Bien sabias las palabras de Simón Bolívar en el Discurso de Angostura: Nada es tan peligroso como dejar permanecer
largo tiempo en un mismo ciudadano el poder. El pueblo se acostumbra a
obedecerle y él se acostumbra a mandarlo; de donde se origina la usurpación y
la tiranía.
Los venezolanos no somos soldados que
debemos obedecer al gobernante de turno. Los venezolanos somos ciudadanos que
elegimos a través del voto a otro ciudadano que esté dispuesto a convertirse en
servidor público o mandatario, y la palabra mandatario en lenguaje democrático
significa persona que obedece a la Constitución y las leyes pero también a los
ciudadanos. Un servidor público es una persona que debe justificar su trabajo y
salario que pagamos los venezolanos con trabajo y esfuerzo, eficaz y eficiente
construyendo obras y solucionando los problemas de todos y no más bien sus
proyectos políticos personales. Uno no se hace gobernante buscando un beneficio
particular y económico. Algunos ciudadanos cuando asumen cargos de
representación popular la piel se les vuelve sensible al sol dejando de caminar
por aquellas o avenidas cuando lo hacían en campaña electoral buscando los
votos o peor aun les molesta que la gente los toque o bese y es por eso que
luego los vemos en carroza cual reina de carnaval lanzando besos al aire. Otros
la piel se les vuelve sensible a las críticas de los ciudadanos que se expresan
a través de los diferentes medios de comunicación social y la respuesta que da
el gobernante a los ciudadanos que presentan sus necesidades es cerrando o
censurando los medios de expresión comunicacional, y en Venezuela y en Apure
tenemos varios ejemplos.
Cuando un gobernante deja de ser
funcionario público y se convierte en autócrata los vemos y escuchamos solo dando
órdenes e insultando a la ciudadanía. Se vuelve una persona que no escucha ni
ve los problemas del país o de su región
Los venezolanos ya estamos cansados de
tener al frente del gobierno nacional a un autócrata que no sólo no escucha ni
ve sino que se siente la reencarnación viva de Simón Bolívar olvidándose de los
temas principales de los ciudadanos como lo son: la inseguridad, el desempleo,
la falta insumos médicos en hospitales y ambulatorios, dotación de escuelas y
construcción de las mismas, reparación de las diferentes vías terrestres del
país, mantenimiento del alumbrado público, construcción de viviendas,
acueductos, etc.
Tenemos la oportunidad el próximo 7
octubre de elegir y renovar todo sistema democrático del país. Ya casi todo
está listo y solo falta que nos movilicemos de forma pacífica y sin miedo
teniendo clara conciencia de la responsabilidad que tenemos no solo frente a la
patria sino también para con las generaciones que están por venir y por las que
se están formando en las diferentes aulas de estudio tanto a nivel primaria,
secundaria o universitaria.
Nos llegó la hora de despertar y
reaccionar asumiendo nuestro protagonismo histórico y democrático. No dejemos
que otros elijan por nosotros o peor que los que están sigan destruyendo al
país.
Dios y La Virgen de Coromoto bendigan a
Venezuela.
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