viernes, 13 de febrero de 2015

Máquina de hacer pobres



La nueva mayoría nacional que está integrada por los que siempre se han opuesto al proceso totalitario y por el sector político de mayor crecimiento de los últimos 17 meses del país que es de los chavistas decepcionados o defraudados por el diosdadomadurismo o madurismodiosdado que en resumen se pueden llamar chavistas indignados por los abusos, por la traición, por el escarnio de la gestión actual del diosdadomadurismo que no es otra cosa que el desastre que estamos viviendo los venezolanos. El diosdadomadurismo intenta ser un gobierno, pero no es otra cosa que la destrucción nacional de todo lo que huela o parezca a emprendimiento o progreso. Esa destrucción ha generado rechazo incluso dentro de las filas del oficialismo sobre todo en aquellas personas que una vez votaron por el presidente Chávez quien por su discurso invitaba a una redención social. Resulta que estando en vida el presidente Chávez a partir del año 2007 empezó la gente a desencantarse porque una cosa era el discurso y otra la realidad. Qué pasó? Que en la base de la pirámide de lo popular, sobre todo la gente del barrio, del caserío a punta de llevar palo, bomba lacrimógena y de ser engañados de manera sistemática y reprimidos por el engaño se fueron abriendo de manera progresiva. Pasada la etapa del encantamiento de las Misiones la realidad del barrio comenzó a verse clara y distinta. Las Misiones se convirtieron en un factor irritante para los habitantes de los sectores populares. La gente del barrio o del sector popular se cansó de ser censada por cualquier organismo para un proyecto que anulaba el anterior hasta que por fin aparecía un organismo que ejecutaba el proyecto pero que beneficiaba a un grupo muy pequeño de los que habían sido censados pero que mostraban lealtad al proceso marchando y participando en mítines presidenciales o en eventos electores porque sino no cobraban la Misión. Esa realidad era lo que venía ocurriendo desde 2007 dentro de las filas del oficialismo. Ese proceso de alejamiento se transforma ya no en progresivo sino en catarata o caída libre cuando llega el señor Maduro a Miraflores como presidente encargado y luego como proclamado por el CNE. El abandono es muy evidente cuando Raúl Castro se anota a caballo ganador pactando con EEUU cuando aún Maduro estaba ubicando la silla en Miraflores, la puerta que llevaba al baño o la llave del escritorio en el despacho presidencial. El proceso es indetenible, ese proceso es cambio porque este país está agotado del hambre, de la mala eficiencia pero sobre todo la corrupción salvaje que ha querido ser ocultada y silenciada por estrategias. Por un lado la hegemonía comunicacional donde la voz de la oposición o del pueblo de a pie no existe. El otro mecanismo es la represión pura y dura o procesos judiciales que se le está aplicando a jóvenes que protestan por un mejor país o a personas que por tomar de colas para comprar alimentos terminan siendo presos. Este tiempo que estamos viviendo no ordinario sino represivo. Ante esa crisis se requieren respuestas económicas, sociales, políticas. Las colas son las consecuencias de la escasez y de un modelo económico que fracasó y que lo que hoy distribuye es miseria y hambre. Para lograr eso hay desmantelar leyes inconstitucionales que cercenan la libertad de empresa y de trabajo. Sin libertad de empresa no existe la libertad de trabajo. La libertad de empresa es para que el ciudadano de a pie no dependa de las migajas del petro-estado sino de nuestro esfuerzo productivo en una plaza laboral o puesto de trabajo con quince y ultimo y seguridad social en una empresa seria y productiva. Sino existe empresa libre el ciudadano se convierte en un rehén económico del gobierno. Necesitamos acabar con la fábrica de corrupción del país que es el régimen cambiario e impulsar la producción nacional.
La encuesta social realizada por la UCAB-Caracas, Universidad Metropolitana y Central de Venezuela revela que de cada 10 venezolanos que reciben beneficio de Misiones 5 no son pobres. No son pobres porque la información no le llega a los más pobres y porque los mecanismo normales como lo son el estudio y el trabajo los han bloqueado quienes se encargan de ejecutar las Misiones. Nuestra sociedad está estancada. La máquina de producir prosperidad está paralizada gracias al oficialismo y los 16 años de desastre. Un matrimonio joven profesionales ambos y empleo ambos si se quieren comprar una casa o apartamento eso está fuera de su alcance por el alto precio del mismo. Una pareja de clase media social para lograr tener un apartamento tiene que meterse en La Gran Misión Vivienda Venezuela. Un venezolano no pobre, clase media y con trabajo que quiera comprar un carro nuevo no lo puede hacer porque no hay, pero tiene que meterse en una misión de carros donde lo tien que pagar con sobre precio.
La política social del gobierno no solo no funciona sino que tampoco atiende a los más pobres del país. En este momento lo que estamos viviendo propiciado con la sanción a Farmatodo y los Supermercado Día a Día es el Dakazo parte II. Los venezolanos ya sabemos lo que pasó con el Dakazo parte I.
Unidad, paz, movilización, proyecto y cambio: Cinco palabras que resumen la actitud y conducta necesarias para detener la caída del país e iniciar su recuperación. Unidad, porque si no estamos unidos no calificamos como alternativa. Pacíficamente, porque solo en paz el pueblo unido puede mostrar su fuerza, inmensa en contraste con las minorías armadas y violentas. Movilizados, porque el ciudadano debe usar TODOS sus recursos en esta pelea, la protesta social y la lucha política, la calle y el voto. 
Animo Venezuela!

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